sábado, 24 de julio de 2010

EL ORIGEN DE LOS OCEANOS




Océano es la palabra utilizada para denominar la parte de la superficie terrestre cubierta por agua de mar.
Existen diversas teorías acerca del origen de los océanos de la Tierra. Por ejemplo a principios del siglo XX se pensaba que los planetas procedían de la materia que se había separado durante la formación del Sol. Por tanto se consideró que nuestro planeta fue una bola rocosa incandescente que se fue enfriando gradualmente. Hasta que el vapor que contenía su atmosfera primitiva se enfrío condensándose y precipitándose en forma de lluvia formando los ríos, lagos y definitivamente los mares y océanos.
Esta visión apocalíptica e incluso bíblica, ha evolucionado hoy en día sobre todo gracias a la geología, a una visión diferente, en la que los planetas ya no son fragmentos de nuestra estrella; si no que se formaron al mismo tiempo que ésta, por la concentración y por colisión de las partículas, que existían dispersas por el espació después del gran “big bang”.
La Tierra con su pequeña masa, comparada con el Sol, nunca alcanzó su temperatura, y no tuvo atmosfera ni océanos tal como se creyó. Sino que fue posteriormente debido a las erupciones volcánicas, cuando se expulso el vapor de agua contenido en las rocas que la constituyeron. Este proceso se generó, debido a la fuerza de la gravedad, ya que estas rocas aumentaron su temperatura, expulsando de forma violenta el agua atrapada en ellas, en forma de grandes erupciones volcánicas. Hoy en día los geólogos han demostrado que en las grandes erupciones se envía a la atmosfera grandes cantidades de agua en forma de vapor que al enfriarse y condensarse en forma de lluvia va creando ríos, lagos y finalmente los océanos. Lo que no hay acuerdo es si esto se produjo en el periodo inicial de los primeros mil millones de años, o bien si ha sido un proceso continuado que todavía se produce; aunque hoy en día menor medida. Es decir los océanos han ido creciendo lo que debido a su peso se han ido hundiendo en la corteza. Aumentando en profundidad y no en anchura. Esto podría explicar de alguna manera la existencia de grandes mesetas marinas que un día estuvieron por encima del nivel de mar.
Por otra parte, la salinidad del agua de mar sería debido a su concentración de sales disueltas procedentes de la erupciones volcánicas, tanto submarinas o como continentales, y también del lixiviado (lavado) de la superficie de los continentes por los ríos que dan sus aportes salinos al océano.
Por último indicaros que los últimos estudios indican que nuestros océanos están siendo contaminados tan rápidamente que en 50 años, se pueden quedar sin vida. Puede ser alarmismo pero creo que merece la pena cuidarlos, ya que han sido el origen de la vida en nuestro planeta. Os recomiendo ver la película “Océanos”, es un verdadero deleite visual.

Texto: Justo Tarancón Fotos: Justo y Raquel